Preparación
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1. En un recipiente apto para microondas, combina la mantequilla y el chocolate blanco. Derrite la mezcla en el microondas durante 1 minuto, removiendo a intervalos cortos para lograr una textura suave y homogénea.
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2. En otro recipiente, mezcla el azúcar, los huevos, la vainilla y una pizca de sal. Utiliza una batidora de mano para batir la mezcla hasta que adquiera una consistencia suave y esponjosa.
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3. Agrega la mezcla de chocolate y mantequilla derretida al recipiente con los ingredientes batidos. Continúa batiendo hasta obtener una mezcla homogénea y espumosa.
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4. Tamiza la harina con el polvo de hornear y agrégala gradualmente a la mezcla. Utiliza un batidor de varillas para incorporar los ingredientes, asegurándote de obtener una masa uniforme.
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5. Añade las chispas de chocolate negro y blanco a la masa y mezcla bien para distribuir de manera equitativa esos deliciosos trozos de chocolate.
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6. Vierte la mezcla en una bandeja para horno y extiéndela de manera uniforme. Precalienta el horno a 180 grados y hornea durante 40 a 45 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
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7. Deja enfriar completamente antes de cortar en porciones, ¡y estarás listo para disfrutar de unos blondies esponjosos y deliciosos!
