Preparación
Preparar la base: Trocea los muffins en pedazos pequeños y colócalos en el fondo de un molde rectangular, asegurándote de cubrir bien toda la superficie sin dejar huecos.
1ª Capa: En un cazo, calienta los 500 ml de leche con los 75 g de azúcar y el 1/2 sobre de cuajada. Remueve constantemente hasta que la mezcla espese ligeramente. Vierte esta mezcla sobre la base de muffins en el molde y deja enfriar en la nevera hasta que cuaje.
2ª Capa: Usa el mismo cazo para calentar los otros 500 ml de leche con 75 g de azúcar y 1/2 sobre de cuajada. Fuera del fuego, añade los 100 g de chocolate para postres y remueve hasta que se integre completamente. Vierte rápidamente esta mezcla sobre la 1ª capa ya cuajada. Deja enfriar de nuevo en la nevera.
3ª Capa: Calienta los 40 ml de nata en un cazo y, justo antes de que empiece a hervir, retira del fuego y añade los 40 g de chocolate para postres. Deja reposar durante 1 minuto y luego remueve hasta obtener una mezcla homogénea. Añade los 10 g de mantequilla y mezcla bien. Vierte esta última capa sobre la tarta y deja enfriar completamente antes de servir.